Pollo a la Coca-cola.

Este plato que hoy luce en algunas de las más prestigiosas cocinas tiene su origen en las aberraciones culinarias de un estudiante universitario.
Cuentan las malas lenguas que un estudiante quiso cocinar un pollo al horno y llamó a su madre para que le explicara. Muy eficiente, tomo nota de todo el proceso y de todos los ingredientes y se puso manos a la obra. Dado que no tenía ganas de cortar cebollas y que no tenía vino... se dijo - Pues con este sobre de sopa de cebolla y una Cocacola, que es lo que tengo-. El resultado tuvo que estar bueno o que él y sus compañeros de piso estaban hambrientos, porque trascendió inmediatamente la receta y se convirtió en una de las más populares en los pisos de estudiante. 20 años después, como digo, es parte de la alta cocina española.
Se ha usado tanto que tiene multitud de versiones. Yo quiero optar por la más cercana al original que, a la par, es la más sencilla.

Ingredientes para 4 personas:
4 muslos de pollo
1 sobre de sopa de cebolla deshidratada
1 lata de Coca-cola (si, también sale buena con Pepsi)


Preparación:

En un recipiente suficientemente grande, pon el contenido del sobre de sopa de cebolla y mezcla con la Coca-cola para que se re-hidrate. Deja que repose así unos 5 minutos, mientras se calienta el horno.Precalienta el horno a 200 ºC con las placas de arriba y abajo, sin convector..
elimina la piel y la grasa blanca de los muslos, será más sano con menos grasa. Realiza unos cortes, dos o tres, en la superficie de los muslos para que penetren bien los sabores. 
Coloca los muslos en la bandeja del horno. Vierte por encima la mezcla de sopa y Coca-cola.
Introduce la bandeja en el horno a media altura y hornéalo durante unos 50 minutos. A mitad de la cocción, abre el horno y, con unos tenedores o unas espátulas o pinzas de barbacoa, dale la vuelta a los muslos para que se hagan bien por los dos lados.
Para emplatar, espolvorea un poco de perejil picado o cebollino fresco por encima,


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